jueves, 16 de julio de 2009

CAMBIO DE MODELO

"El mundo de 2006 ha desaparecido"

JOSÉ MANUEL CALVO 16/07/2009

El profesor Xavier Sala i Martin
 

El profesor Xavier Sala i Martin cree que el pesimismo responde más a razones psicológicas que económicas.ULY MARTÍN

 

Sala i Martin acaba de intervenir en el Encuentro Financiero Internacional de Caja Madrid y EL PAÍS: crisis, crisis, crisis. Ahora, ante un espectacular plato de huevos fritos con chistorra, habla de la importancia de la psicología en la economía y de la ausencia de liderazgo en la crisis.

"La mayoría de los españoles no va a sufrir la crisis de manera directa. El paro es una catástrofe para el 18%, para el 20% de la población. Pero eso quiere decir que cuatro de cada cinco van a seguir trabajando. Las crisis son asimétricas: unos lo pierden todo, otros casi ni se enteran. Y sin embargo, la gente tiene miedo: no va al cine, a los restaurantes, bebe un vino más barato, no se compra ropa... Cunden el pesimismo y el malestar, pero por razones psicológicas más que económicas. Por eso es importante el liderazgo, para que la gente no funcione guiada por el miedo".

Y ahí es donde fallan los responsables: "Entiendo que el Gobierno tiene que dar ánimo, que no es bueno que cunda el pesimismo, pero la gente no debe ver que el líder está en las nubes. El líder tiene que ser creíble. Y Rodríguez Zapatero no ha encontrado la fórmula para serlo y a la vez dar ánimos". ¿Qué es lo que falta entonces? "Un plan. Se han aprobado medidas sin coherencia intelectual entre ellas, y eso es un error. Zapatero tendría que haber presentado un plan integral que diera la impresión de que sabía lo que hacía".

Y vuelve a los símiles médicos: "Al fin y al cabo, somos los médicos de la economía. El médico, si tienes un cáncer, no te dice que tienes un dolor de muelas, que no pasa nada. Te dice lo que tienes y te propone un plan para curarte. Decir la verdad y hacer lo que es necesario hacer: ésa es la esencia del liderazgo".

Lo que tiene que hacer el Gobierno es buscar la forma de ayudar al 20% que está en paro a volver al sistema productivo. "Yo ligaría el subsidio a que el parado se reciclara. Dejaría de llamarlo subsidio y lo llamaría, no sé, 18 meses de clases, no de paro. Un año y medio aprendiendo lo que sea: Excel, trabajo bancario, a ser camarero, lo que sea...; todo menos pensar que se va a volver a la construcción. El mundo de 2006 ha desaparecido. Todo ha cambiado. Hay que ir hacia la flexiseguridad, a proteger al trabajador, no al puesto de trabajo. Ahí está Dinamarca: en plena crisis, un 4% de desempleo".