jueves, 28 de enero de 2010

Necesidad de un liderazgo diferente

Las características del entorno actual están demandando directivos que sean especialmente capaces de “cambiar lo existente”, más que de gestionar y administrar lo disponible.
Esos rasgos están precisando no sólo más liderazgo, sino un tipo de liderazgo diferente al ejercido hasta ahora; un estilo de dirección basado en la búsqueda de una situación nueva, más que en la transacción y en el intercambio (“tanto me das, tanto te doy”); una forma de dirigir transformadora del estado de cosas actual.
Precisamos un liderazgo transformador. Que busque, no el equilibrio y la perfecta administración, sino la superación, la oportunidad, el ir más allá:
Que potencie el aprovechamiento de los puntos fuertes frente a la corrección de los puntos débiles.
Que se base más en la influencia que en el ejercicio del poder.
Que busque inspirar más que ordenar y mandar.
Que prefiera crear más que duplicar.
Que pretenda anticiparse más que reaccionar.
Que proponga sueños a alcanzar más que obligaciones que cumplir.
Que aspire a lo mejor sin conformarse con bueno.
Que eleve las necesidades y valores de sus colaboradores.
Que considere al trabajador como un individuo diferente, una persona plena, y un ser capaz de desarrollarse.
Que aumente la consciencia del colaborador respecto de lo que está bien, es bueno, y es importante.
Que incremente la madurez y la motivación del colaborador.
Que le anime a ir más allá de sus propios intereses, en bien del grupo, de la organización y de la sociedad.
En respuesta a estas demandas, proponemos un modo de dirigir que la experiencia confirma que genera más eficacia, más satisfacción y mejor disposición a un esfuerzo extra.

FUENTE:

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LA FOTO ES COSA MIA

CAMBIO DE MODELO: ECONOMICO

Sarkozy abandera la reforma del sistema financiero internacional

• El presidente francés defiende la regulación y la intervención pública

• El jefe del Elíseo apoya el plan de Obama para controlar los excesos bancarios

EL PERIÓDICO 28-01-2010 BARCELONA

Y llegó el líder. Como en plena debacle financiera en el otoño del  El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se dirige al auditorio en el Foro Económico Mundial en Davos, ayer. Foto: afp / eric piermont2008, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, tomó ayer las riendas de la situación y se comprometió en Davos (Suiza) a liderar la reforma del sistema financiero internacional, aprovechando que su país presidirá el año que viene el club de los países ricos (G-8) y el de los que integra a estos y a los emergentes que están en vías de desarrollo (G-20).
Ante una audiencia formada por la élite económica, financiera y empresarial mundial, Sarkozy apostó por «un nuevo Bretton Woods», ciudad estadounidense en la que se firmaron en 1944 los acuerdos de los que nacieron el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM). Este punto, dijo, formará parte de la agenda principal de las dos agrupaciones de países, en especial del G-20, que ganó protagonismo tras el estallido de la crisis.
Pero sus planteamientos durante el discurso inaugural en la 40 Participantes en el foro, ayer en la entrada del Palacio de Congresos.  Foto: afp / eric piermontedición del Foro Económico Mundial en Davos no se quedaron ahí. Además de apoyar los planes del presidente de EEUU, Barack Obama, de limitar la actuación de la banca, defendió con énfasis la regulación y la intervención pública. «Todos sabemos qué hubiera ocurrido sin la intervención estatal para mantener la confianza y apoyar la industria: el colapso total». «No es cuestión de liberalismo, ni de socialismo, ni de derechas, ni de izquierdas, es una realidad», agregó.
En su opinión, el debate abierto por Obama para disuadir a la banca de que no especule y no financie fondos especulativos no puede ser acometido por un solo país, por más peso que este tenga. «Ese debate debe decidirse en el G-20», dijo. Reiteró las críticas a las retribuciones astronómicas de algunos banqueros, que «ya no pueden ser más toleradas».
Se refirió a «la depreciación del futuro», al señalar que «solo contaba el presente», y advirtió: «Seguiremos haciendo correr riesgos insostenibles a la economía, y animando a la especulación, y sacrificando el largo plazo si no cambiamos la reglamentación bancaria, las reglas de la prudencia, las reglas contables».
NUEVO CAPITALISMO /El presidente francés fue más lejos. «No reconciliaremos a los ciudadanos con la mundialización, con el capitalismo, si no somos capaces de aportar un contrapeso al mercado; correctivos», subrayó. Ahora se trata de debatir «cómo volver a poner la economía al servicio del hombre». «Pero entendámonos: no se tata de preguntarnos por qué sistema vamos a sustituir el capitalismo, sino de saber qué capitalismo queremos» en adelante, reflexionó el mandatario.
Antes que Sarkozy, la presidenta de Suiza y ministra de Economía, Doris Leuthard, fustigó a los banqueros, a los que responsabilizó de la crisis financiera mundial. En lo que pareció ser el disparo de salida de una esperada confrontación entre los dirigentes políticos y los del sector financiero, Leuthard apuntó directamente a los banqueros, a quienes acusó de «tratar incluso de evadir sus responsabilidades».
«Este año todavía se van a entregar bonos por un volumen inédito». Como el presidente francés, recordó que, desde hace más de un año, los esfuerzos coordinados de los bancos centrales, las organizaciones internacionales y los gobiernos han permitido evitar el hundimiento de la economía mundial.

TODO LO QUE SE HAGA SERA POCO,

AL MENOS ESTE SIGUE CON LAS MISMAS IDEAS,

Esto decía en Marzo del año pasado:

Sarkozy: "El mercado todopoderoso que siempre tiene razón se ha terminado"