jueves, 29 de enero de 2009

¿SE ENTERAN DE ALGO?. O en cada momento cambian de opinión.


30/01/2008
Lne.es » Economía
El FMI constata la desaceleración mundial y prevé que Europa crezca sólo el 1,6%.
Oviedo
El FMI redujo ayer su pronóstico de crecimiento mundial para este año en tres décimas, hasta el 4,1 por ciento, debido a la «tensión» y a la «incertidumbre» que agarrotan a los mercados financieros. Para Estados Unidos, la fuente de las tribulaciones a nivel mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI), que preside el francés Dominique Strauss-Kahn, constata que los problemas en el sector inmobiliario se han extendido al resto de la economía, donde las manufacturas, el empleo y el consumo han perdido dinamismo. Por ello, el organismo redujo en cuatro décimas su previsión de crecimiento para España, hasta dejarla en el 1,5 por ciento para 2008, cifra que incluye los previsibles efectos de un plan de estímulo fiscal del Congreso.

Finanzas.com
España seguirá en recesión en el 2010, según el FMI
César Muñoz Acebes
Washington, 28 ene (EFE).- El FMI rebajó hoy de nuevo sus previsiones de crecimiento para la economía española, que a su juicio se contraerá el 1,7 por ciento este año y continuará en recesión en el 2010, al contrario de lo que mantiene el Gobierno.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) redujo en siete décimas el pronóstico de crecimiento para este año que había adelantado en diciembre ante el empeoramiento del entorno económico mundial.
Su pesimismo se extiende al 2010, el año en el que en su anterior cálculo vislumbraba la recuperación, pero en el que ahora cree que continuarán los números rojos, con un decrecimiento de la economía del 0,1 por ciento.
Los pronósticos del Fondo están en línea con los adelantados por la Comisión Europea hace algo más de una semana y son peores que los que maneja el Gobierno español, especialmente para el 2010.
El Ministerio de Economía cuenta con una reducción del Producto Interno Bruto (PIB) del 1,6 por ciento este año, pero un aumento del 1,2 por ciento para el 2010.
En respuesta al anuncio del FMI, fuentes del Gobierno en Madrid defendieron su cálculo para el 2010, cuando las medidas adoptadas para paliar la crisis y las bajadas de los intereses y de la inflación pondrán en funcionamiento de nuevo los engranajes de la economía, en su opinión.
En cambio, Charles Collyns, subdirector del departamento de Análisis del FMI, dijo en una entrevista con Efe que la entidad cree que España seguirá en recesión el año que viene porque continuará el hundimiento del sector inmobiliario.
"La corrección de los excesos del mercado de la propiedad tardará mucho tiempo, dado que hubo un aumento enorme de la inversión y de los precios", dijo.
No sólo España sufrió el tijeretazo del Fondo, sino que el organismo redujo sus previsiones de crecimiento en los principales países del mundo.
De forma colectiva, el crecimiento mundial este año será tan sólo de un 0,5 por ciento, su menor cifra desde la Segunda Guerra Mundial, mientras que en el 2010 experimentará un repunte "gradual", hasta el 3 por ciento, siempre que los gobiernos lleven a cabo intervenciones decisivas en la economía, indicó el FMI.
En noviembre el organismo había pronosticado que el PIB del planeta se iba a situar en un 3,2 por ciento este año, pero corrigió sus cálculos debido a la intensificación de los problemas financieros y al derrumbe de la confianza de los consumidores y las empresas, dijo en una rueda de prensa Olivier Blanchard, su economista jefe.

De los Toyos confía en salir de la crisis, «ya que casi todos los EREs son temporales»



El alcalde aprecia que el Fondo Estatal de Inversión va a suponer la creación de 260 empleos en el ámbito de la construcción, gracias la realización de 14 proyectos. Reclama ayudas para el sector de la automoción, al igual que en Europa
ALBERTO ECHALUCE

EIBAR. DV. El alcalde, Miguel De los Toyos, ve con «preocupación» la situación de crisis económica que atraviesa la ciudad, aunque se muestra confiado en que la industria salga adelante en base a la temporalidad de los Expedientes de Regulación de Empleo (EREs) que se han presentado o que se están tramitando.
«Veo con preocupación la situación de sectores como la automoción, donde se han presentado o se tramitan varios EREs, al tiempo que hemos podido conocer que algunos eibarreses que tenían empleo fijo o eventual han ido al paro. No obstante, creo que vamos a salir adelante porque la mayoría de los EREs tienen un carácter temporal y a poco que la situación mejore se va a recuperar la normalidad en la industria», dijo el alcalde, De Los Toyos.
El alcalde, consciente de la situación que atraviesa la industria, ha tratado de tramitar con celeridad una serie de proyectos urbanísticos susceptibles de recibir ayudas del Fondo Estatal de Inversión Local. En base a sus previsiones, las obras que se realizarán en los próximos meses darán empleo directo a 260 personas en Eibar gracias a los proyectos presentados por el Ayuntamiento, que se prevé que recibirán próximamente el visto bueno del Gobierno.
«El criterio que se utiliza es la concesión de ayudas que supongan la creación de empleo directo. Son contratos de obras que podrán durar 3 o 6 meses. Sabemos que los operarios que se podrán contratar no son de Eibar, pero tenemos que tener en cuenta que se puede generar empleo indirecto, porque la barandilla que se va a instalar en Paseo San Andrés incidirá en una empresa fabricante de ese tipo de elementos».
De los Toyos era consciente de que «no tenemos un sector de la construcción fuerte, pero sí reclamamos ayudas para que se apoye a la automoción, el sector más castigado por la situación de crisis, tal como se ha realizado en otros países de Europa». En este sentido, confía en que el Fondo Estatal creará empleo «especialmente en el ámbito de la construcción», al tiempo que ha opinado que las obras incluidas en el citado fondo «puedan traer alguna pincelada de optimismo». En relación a la aprobación definitiva de los proyectos presentados por Eibar, el alcalde espera la confirmación «en el transcurso de esta semana».

Las agencias de 'rating' conservan el poder pese a sus graves errores



26/1/2009
ROSA MARÍA SÁNCHEZ. MADRID

El 12 de enero, la agencia de calificación americana Standard & Poors anunció que estaba pensando rebajar la máxima nota concedida a la deuda pública española. Eso suponía perder la matrícula de honor ostentada por España desde enero del 2002 (rating triple A) y bajar a sobresaliente alto (AA+). El solo anuncio provocó un bandazo financiero. Un minuto después, el euro se depreció frente al dólar el 1%. Los inversores entendieron que el riesgo de impago del Reino de España, aunque remoto, era algo mayor que en países como Alemania. En cinco días, la deuda española se encareció en 0,27 puntos y quedó convertida en papel mojado la mitad de la rebaja del precio oficial del dinero (de 0,50 puntos) que había promovido el Banco Central Europeo (BCE) unos días antes.El día 19 de enero, S&P cumplió su amenaza y rebajó el rating de la deuda española. Según el Gobierno, eso le va a costar al Tesoro 170 millones de euros. Otra cosa es lo que tendrán que pagar particulares y empresas en forma de hipotecas y créditos más caros (un cuarto de punto más en el tipo de interés). Un ejemplo: los 50.000 millones que empleará el Estado para comprar activos a la banca costarán 135 millones más en intereses de deuda pública; el coste se trasladará a bancos y cajas y estos lo cargarán a sus clientes.CREDIBILIDAD DEL MERCADOEsta es la crónica rápida de cómo en una semana, las agencias de rating, fuertemente desacreditadas por la crisis de las hipotecas subprime, han puesto en evidencia que siguen siendo todopoderosas. "Tenemos la credibilidad que nos otorgan los mercados", dice la analista de S&P Myriam Fernández de Heredia, autora del informe sobre España.Las tres grandes agencias de calificación, las estadounidenses S&P, Moody's y Fitch, están en el origen de la crisis financiera mundial. Ellas concedieron altísimos ratings a los bonos construidos a partir de hipotecas de EEUU de altísimo riesgo (subprime). Gracias a ello, los bonos fueron adquiridos con total confianza por entidades y fondos de pensiones y de inversión de todo el mundo que ahora sufren las consecuencias.La metedura de pata de las agencias de rating fue tan monumental que fueron cuestionadas por las autoridades de todo el mundo, que, desde entonces, debaten cómo reforzar su credibilidad e independencia. Pero eso no impide que sigan teniendo una influencia enorme.Diferentes expertos coinciden en que, a pesar del error con las subprime, las agencias de calificación "conservan un gran prestigio". "Fallaron en la calificación de los bonos estructurados a partir de las subprime, pero es que la titulización de hipotecas era un producto financiero relativamente reciente", concede un experto. Para el resto de los activos financieros, conservan intacta la credibilidad acumulada durante más de un siglo de historia, añade. Hace unos días, el director de regulación del Banco de España, José María Roldán, abundaba en esta cuestión. Reconocía que, si bien es cierto que "la credibilidad de las agencias ha caído", sus valoraciones solo erraron para ciertos activos complejos.HASTA LOS MÉDICOS SE EQUIVOCANEl presidente de la sociedad de infraestructuras Abertis, Salvador Alemany, confesó el jueves su sometimiento a la dictadura de las agencias de calificación. "Nos preocupan los rating", dijo en un encuentro con periodistas. "Es un tema importante, sea cual sea la credibilidad de las agencias y es algo que nos somete a una gran autodisciplina", justificó."Los médicos también se equivocan", ejemplifica el profesor del IE Business School, Rafael Pampillón. En su opinión, es seguro que las agencias han aprendido de sus errores y hoy son más fiables, "del mismo modo que el cirujano que ha cometido un error tiene, a partir de entonces, más cuidado".Y así lo explican las agencias: "Estamos prestando mucha atención a lo que el mercado dice sobre nuestros ratings y estamos adoptando una amplio abanico de medidas para un mayor reforzamiento de nuestros procesos de valoración y para mejorar la transparencia. Creemos que cuantos más inversores sepan lo que hacemos y cómo lo hacemos, estarán mejor situados para tomar decisiones con una buena información", dicen en Standard & Poor's.